Varios trabajos confirman las
ventajas de estar pendientes del bebe
Por Fabiola
Czubaj
En los
últimos años, los padres primerizos calmaron sus dudas acerca de cómo criar a
sus hijos con respuestas que provienen de distintas teorías, métodos y
técnicas, a veces sin demasiada comprobación. ¿Hay que darle de comer cada vez
que el bebe lo demanda o conviene organizar una rutina con horarios? ¿Hay que
alzarlo cuando llora o es mejor que aprenda a esperar?
Las
librerías son un fiel reflejo de esa búsqueda: por lo menos 500 títulos
prometen revelar los secretos de una crianza perfecta. Y siempre están los
consejos que aportan a voluntad amigos y familiares sobre la mejor forma de
dormir, alimentar o calmar al bebe con recetas propias o ajenas.
En ese
contexto, la teoría del apego (propone no escatimar respuestas a cada pedido o
necesidad del bebe) suma evidencia en su favor. "Hoy podemos responder
científicamente a muchas de las preguntas que se hacen los padres, sobre todo
los primerizos. La teoría del apego es la más sólida, sobre todo en los temas
de desarrollo infantil", afirma la doctora en psicología Inés Di Bártolo,
profesora de la Universidad Católica Argentina (UCA).