Adjuntos
Las demostraciones de afecto son
esenciales para fortalecer nuestras relaciones y para desarrollarnos como
personas. Las caricias, los besos, los gestos, los elogios, etc., se dan
normalmente entre los miembros de una familia y entre amigos o parejas. Para la
prevención del abuso sexual es fundamental que los niños y las niñas aprendan a
distinguir cuáles son sus límites corporales y a diferenciar entre caricias que
respetan dichos límites y las que los traspasan.
Las caricias que respetan
nuestros límites nos hacen sentir cercanos a la otra persona y sentimos
alegría, amor y mayor autoestima. En tres palabras: ¡Nos sentirnos bien!
Aquellas que sobrepasan nuestros
límites nos hacen sentir mal con nosotros mismos, nos generan sentimientos
encontrados respecto a la otra persona y también sentimientos de culpa e
incomodidad.
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