Una vez había dos mujeres
que nunca se conocieron.
Una a la que no recuerdas
y a la otra la llamas Madre.
Una fue tu estrella guiadora,
la otra fue tu sol.
La primera te dio vida
y la segunda te enseño a vivirla.
La primera te dio necesidad de amor
y la segunda estaba ahí para dártelo.
Una te dio nacionalidad,
la otra te dio un nombre.
Una te dio la semilla de talento,
la otra te guio en la manera de usarlo.
Una te dio emociones
y la otra calmó tus temores.
Una te vio la primera sonrisa
y la otra secó tus lágrimas.
Una te dio,
Era lo único que podía hacer.
La otra oró por un hijo
y Dios la guio directamente a ti.
Y ahora me preguntas con lágrimas,
las preguntas viejas de la edad durante los años.
¿Hereditario o Ambiente?
¿De cuál eres producto?
Ninguno mi amor, ninguno.
Solamente de dos diferentes tipos de amor.
Una a la que no recuerdas
y a la otra la llamas Madre.
Una fue tu estrella guiadora,
la otra fue tu sol.
La primera te dio vida
y la segunda te enseño a vivirla.
La primera te dio necesidad de amor
y la segunda estaba ahí para dártelo.
Una te dio nacionalidad,
la otra te dio un nombre.
Una te dio la semilla de talento,
la otra te guio en la manera de usarlo.
Una te dio emociones
y la otra calmó tus temores.
Una te vio la primera sonrisa
y la otra secó tus lágrimas.
Una te dio,
Era lo único que podía hacer.
La otra oró por un hijo
y Dios la guio directamente a ti.
Y ahora me preguntas con lágrimas,
las preguntas viejas de la edad durante los años.
¿Hereditario o Ambiente?
¿De cuál eres producto?
Ninguno mi amor, ninguno.
Solamente de dos diferentes tipos de amor.
Anónimo.
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