miércoles, 10 de agosto de 2016

El Huésped

Una dura película sobre los trastornos de apego graves


La película de hoy va dirigida sobre todo a profesionales relacionados con la adopción y a padres y madres, que quieran conocer los trastornos de apego 
graves en acción.
No es una película fácil, más bien dura y no hace concesiones a idealizar la adopción, en absoluto. La película se llama El Huésped, y tiene muchos temas interesantes en relación al acogimiento y a la adopción. Hace reflexionar mucho sobre la ligereza con que a veces se deciden dar a ciertos niños en adopción, que quizás nunca estarán preparados para poder ser adoptados. Mal gestionado se produce un fracaso en la adopción y por tanto una vuelta a una situación traumática, tanto para el niño o niña, como para los padres adoptivos.”
por José Ignacio Díaz Carvajal
El Huesped (The Boarder) (2012)
Director: Jolene Adams
EEUU
2012
100 min.
Drama
Sinopsis: La familia Williams acoge a un niño mayor, a petición de los servicios sociales, rebotado de varias casas de acogida. Se lo ofrecen porque saben que tienen experiencia. Tienen ya dos adolescentes adoptados. Pronto descubren que el niño trae muchos problemas con él.
Extraordinaria película, de mucha dureza, pues el tema que trata es el del trastorno de apego grave de tipo punitivo. (En la película el Trastorno Reactivo de Apego) No hace concesiones a ninguna actitud negadora de las dificultades en las que se puede encontrar una familia a la que le toque un niño con estas características.
Por un lado tenemos a la familia Williams, dónde el padre ha sido un niño que vivió acogido en una familia, y decide adoptar, con su mujer.
Tienen dos hijos adolescentes y llevan una vida armoniosa y realizada. Él es pastor de una iglesia baptista y aprovechando su buena disposición le ofrecen este niño, que viene rebotado de otras familias de acogida.
Deciden ayudarle, y aunque intentan integrarle como un hijo más, el niño adopta una postura ambivalente. Al padre le da una cara de bondad y de que no ha roto en su vida un plato. Pero a la madre empieza a mostrarle su otra cara más oscura y dolorosa, que llegará a ser peligrosa para su integridad y la de su familia.
El niño va haciendo desaguisados, agresiones, en secreto. Otras abiertamente, pero las más graves quedan veladas. Hasta que esta mujer lo descubre y reaccionan.
Es significativo que la primera ayuda que reciben de una psicóloga que desconoce este tipo de problemáticas (los trastornos del apego graves) no solo no le ayuda, sino que la deja desamparada y con la idea de que es mala madre y es ella la causante de los problemas.
Y también es notable, cómo los servicios sociales se habían negado a enfrentar esa historia terrible, de este niño, y le habían ocultado a estos padres una realidad, que si hubieran conocido previamente, y bien asesorados, igual no aceptan acoger.
Por otro lado, este niño viene a desestabilizar a toda una familia, y a los hijos anteriores de este matrimonio les hace mucho daño toda esta situación.
Afortunadamente encontrarán ayuda en otra profesional preparada, que les ayudará, pero que también dejará claro, que no siempre tienen solución estos niños en una familia, y que a veces no pueden seguir en ella.
Los padres, a pesar de todo el sufrimiento, seguirán ayudando a este niño, aunque ahora internado en una institución, mientras dura su tratamiento tanto psicológico, como penal, por los desaguisados que ha hecho.
Iremos conociendo y comprendiendo, el porqué y el origen de unos comportamientos tan negativos, pero que tienen una justificación traumática en la historia de este niño (incluidos los de sus acogimientos fallidos, dañinos).
Esta película es imprescindible, pero sobre todo para profesionales de la adopción.
Los padres que puedan asustarse al verla, como si cualquier niño que venga a una adopción, podría ser como el protagonista, decirles, que realmente este es un caso muy grave, que en la mayoría de los casos si no tiene el entorno terapéutico e institucional adecuados, es un fracaso seguro de su adopción. Pero que la mayoría de los niños y niñas adoptados no vienen con un trastorno de apego desorganizado, aunque puedan venir, con lo que en el mundo de la adopción tienden a llamar “su mochila” (es decir, su carga de dificultades o problemas, relacionados con su historia de abandono o con sus traumas recibidos).
La adopción no siempre es la solución de un niño tan gravemente dañado, como éste.
fuente: www.adopcionpuntodeencuentro.com

ARTÍCULOS RELACIONADOS:
URL Abreviada: http://goo.gl/kOFSjr

No hay comentarios:

Publicar un comentario